El benchmarking publicitario consiste en analizar las acciones, estrategias y resultados de otras marcas o competidores directos en el ámbito publicitario. Este proceso permite conocer cuáles son las mejores prácticas del mercado, qué canales están funcionando y cómo se están posicionando otras empresas. Su finalidad es mejorar el rendimiento propio, no imitar sin criterio.
Realizar un benchmark te ayuda a detectar oportunidades que tu marca aún no aprovecha, mejorar la toma de decisiones y reducir riesgos. También permite ver con claridad si tu inversión está siendo eficiente en comparación con la industria. En el mundo publicitario, no saber qué hacen tus competidores es como caminar con los ojos vendados.
Puedes hacer benchmarking en campañas digitales (como Facebook Ads, Google Ads, TikTok), publicidad tradicional (radio, TV, medios impresos) o incluso en activaciones BTL y PR. Lo más importante es elegir competidores relevantes y comparables, del mismo sector o con objetivos similares, para obtener insights útiles.
Existen distintos tipos de benchmarking: el competitivo (compararse con rivales directos), el funcional (compararse con empresas de otro sector pero con buenas prácticas), y el interno (comparación entre departamentos o campañas propias). En publicidad, el benchmark competitivo es el más utilizado, aunque combinar enfoques puede ser muy valioso.
Primero, define tus objetivos: ¿quieres mejorar CTR, alcance, creatividad, presupuesto? Luego, elige tus competidores y canales de análisis. Investiga campañas actuales, plataformas utilizadas, segmentación, formatos visuales, mensajes clave, resultados públicos (si los hay), y documenta todo para comparar frente a tus propios datos.
Para benchmarking en publicidad digital, puedes usar herramientas como Meta Ads Library (Facebook), Semrush o SimilarWeb para analizar tráfico web, Google Ads Transparency Center, y BuzzSumo para ver contenidos virales. Estas plataformas permiten ver anuncios activos, segmentaciones y creatividad de otras marcas.
Compara elementos como frecuencia de publicación, formato de anuncios, tono del mensaje, llamados a la acción, y si es posible, métricas como CTR, CPC o tasa de conversión. El objetivo no es solo ver qué hacen, sino entender por qué lo hacen y cómo podrías hacerlo mejor o diferente.
Luego del análisis, identifica tus áreas de mejora, posibles innovaciones y aspectos que podrías adaptar. No se trata de copiar, sino de reaplicar estrategias que se ajusten a tu identidad y objetivos. El benchmarking debe alimentar tu plan de marketing con ideas validadas y reducir la improvisación.
El benchmarking no es un ejercicio único, sino un proceso continuo que ayuda a mantenerte actualizado, competitivo y más estratégico. Las tendencias y el comportamiento del consumidor cambian rápidamente; hacer benchmarking regularmente te asegura evolucionar al ritmo del mercado y optimizar tus campañas constantemente.
Fuentes:
- Kotler, P. & Keller, K. (2016). Dirección de marketing
- Meta Ads Library: https://www.facebook.com/ads/library
- Semrush Benchmark Tool: https://www.semrush.com
- Hubspot Blog: https://blog.hubspot.com/